CABAÑA DE ESQUÍ EN LAS MONTAÑAS
La esfera es la forma de volumen más efectiva en términos de eficiencia energética.
Proporciona el máximo espacio interno con menos superficie, lo que significa una
disminución de la pérdida de energía.
Basado en un simple encargo, este refugio para un grupo de esquiadores ofrece
una sala de estar abierta, tres dormitorios y servicios. El albergue fue diseñado
teniendo en cuenta los principios básicos de la física para proporcionar el espacio
más cómodo posible en un área de clima extremo.
Otra consideración importante fue el hecho de que, con este proyecto, queríamos
mostrar el potencial de utilizar nuevos materiales de construcción de manera
innovadora para producir mejores y edificios energéticamente sustentables.
La bóveda que cubre todo el espacio interno ha sido pensada en bloques de
cemento aireado dispuestos siguiendo las curvas de un encofrado de madera. El
hecho de que haya aire dentro de los poros le da a este material una excelente
capacidad de aislamiento térmico e impermeabilidad. También, porque tiene una
base cementicia, proporciona protección contra el fuego.
Estos bloques son fáciles de cortar y tallar. Esta propiedad fue clave para el
diseño. Cada pequeña parte de esta bóveda necesita adaptarse a diferentes
ángulos. Después de ser asentada sobre el encofrado, muchas pequeñas ranuras
deben ser abiertas en la superficie para recibir delgadas barras de acero, alrededor
de 5 milímetros. Esto forma una grilla interna que proporciona resistencia estructural
a la solución.
La concavidad de la cubierta y ventanas bien posicionadas permiten vistas y evitan
el efecto de los fuertes vientos. Estructuras externas de madera complementan el
diseño proporcionando una capa adicional de protección y almacenamiento para los
equipos de esquí.
Materiales : Hormigón celular, acero y madera. Área: 120 m²